Buscar en LAFH.info
viernes 19 abril 2024
Secciones LAFH
Consultoría
Conferencias
Formación en red
Artículos
Agenda
Curriculum
GC-Red
Equipo
Servicios
Zona @rroba
> Artículos > Entrevistas
Entrevista con Alberto Lozano. Tecnólogo

Autor: Karma Peiró
27/8/2002
Fuente de la información: Revista en.red.ando
Organizador:  Enredando.com
Temáticas:  Internet  Tecnología 


Entrevista número 50

Albert Lozano, fundador de Expert Decisions, S.L


"En Internet ya somos una entidad planetaria"

por Karma Peiró


__________________________

Alberto Lozano (1947, Santa Coloma de Gramanet -Barcelona-) es un profesional de la informática y la electrónica, enamorado del Unix pero adicto al MacOS. Empezó vendiendo calculadoras digitales electrónicas en 1969, y haciendo viajes a Eidhoven (Holanda) —donde Philips tenía su sede central— hasta que se hartó. En 1976, Apple entró en su vida como una bocanada de aire fresco, y consiguió que se fuera apartando de los proyectos de electrónica pura para introducirlo en la informática personal. Se fabricó su primer ordenador y conoció personalmente a los fundadores de Apple: Steve Wozniak y Steve Jobs.

Durante mucho tiempo tuvo un pie aquí y otro en EEUU: abrió una tienda dedicada a la venta de ordenadores en España, llamada Isecom; y montó la compañía norteamericana Fastware, en sólo tres días y con 100 dólares. Luego llegaría la venta de software desde otras empresas que fundó como Nanosoft y Megasoft; la creación de la primera BBS, SóloMac, para d ar soporte técnico a sus clientes; y el proyecto de la editorial EDICA para montar todo el sistema redaccional y de fotocomposición del periódico Hoy de Badajoz con Macintosh (corría el año 1988). De aquí pasó a diseñar la red informática de buena parte de los diarios de España como la del extinto Sol de Madrid, el Sport de Barcelona, el Diari de Andorra, la Prensa de Ibiza, etc. y a asesorar en comunicaciones internas a muchos otros medios.

En la primavera de 1993, se le acercó Eudald Doménech —otro visionario de gran peso en la historia de la Red en nuestro país— y le propuso crear Servicom (el primer Proveedor de Servicios de Internet-PSI), a partir de SoloMac. El enlace duró poco más de un año por diferencias profesionales, y Lozano continuó con Seker y Acción Virtual (otros dos PSI). Hace un par de años, fundó Expert Decisions, S.L., una empresa de servicios tecnológicos.

Alberto Lozano también es articulista habitual de medios escritos y comentarista ocasional en radio y TV sobre temas relacionados con Internet.


Alberto Lozano se define así mismo como un visionario enamorado de la tecnología. Dice estar siempre sobre la cresta de la ola, y ni sus 110 kgs. de peso, ni sus 55 años le hacen perder el equilibrio. Desde esta posición, vive mirando al futuro e inventando máquinas y negocios antes de que éstos sean aplicados por todos. “Hay que ir por delante de la competencia, pero no demasiado, porque entonces se fracasa”. La historia de Internet en España lo hizo tremendamente popular con cada uno de los proyectos que llevó adelante durante los años 90. Esta popularidad, sin embargo, no lo ha hecho todavía millonario: “Me he pasado la vida fundando empresas con objetivos visionarios y siempre haciendo que otros, meses o años más tarde, ganen realmente dinero con esas ideas”. Hace unos años fundó Expert Decisions, una consultora tecnológica, cuya visión de futuro se reserva.

________________________

P
: ¿Para qué sirve Internet?

R: Internet no es web ni es correo electrónico, es una red de carreteras para que cada uno la utilice como quiera: para entender, para transitar, para divertirse o para delinquir. Internet son las carreteras, si tú las utilizas porque tienes una flota de camiones y te ganas la vida transportando material, vale. Si las utilizas porque tienes un coche y quieres irte de vacaciones a la costa, vale. Internet es una superficie, que cada uno la use para lo que quiera.

P: En la Red hay verdaderos gurús desconocidos pero también auténticos ‘fantasmas’ conocidos. ¿Se atrevería a darme nombres?

R: (risas) No, no sería ético, pero te puedo dar pistas. Todos los que realmente han trabajado para construir la Red que tenemos en estos momentos son los menos conocidos. Los conocidos, en general, son los ‘fantasmas’ porque son los que se han aprovechado de los que han trabajado de verdad. Pero los nombres… ponlos tú o el que lea esto.

P: Por algún lado he leído que se considera un hacker, pero de los de antes. Porque los de ahora escriben libros avalados por investigadores sociales, como Pekka Himanem, y recomiendan su ética laboral. ¿Se ha perdido parte de la esencia del hacker o está bien que se difunda su manera de ser de esta forma?

R: Quiero recordar que tengo 55 años. Cuando nació la definición de hacker era cuando la gente nos montábamos nuestros propios ordenadores 'a hachazos', de aquí viene el nombre. Y eso sucedió en los años 70, en EEUU. No asaltábamos nada, ni entrábamos -ni por las buenas ni por las malas- en sistemas ajenos. Además, que eso tiene actualmente otra definición que es la de 'cracker'. Intercambiábamos experiencias y nos veíamos en cafeterías con cajas de zapatos llenas de tarjetas perforadas, claro, era la tecnología de los años 70. Porque ahora no vale la pena, pero yo siempre he hecho mis propios ordenadores. Esa es la verdadera definición de un hacker. Sobre lo que me preguntas de que hackers escriban sobre la ética del trabajo nuestro me parece estupendo, al menos no desvirtúa nuestra esencia. El hacker es una persona que no actúa de mala fe, actúa en respuesta a un reto tecnológico, igual que el jugador de ajedrez actúa porque es un reto que tiene con su inteligencia. El reto del hacker es vencer sistemas o intentar ver cómo están hechos y entrar dentro, pero sin malicia alguna. Así es que ya está bien que se haga esta difusión. Pero ahora la gente asocia hacker con los que están haciendo actividades ilegales, y buena parte de culpa la tienen los periodistas porque en los titulares se lee: "El hacker entró y se llevó 10 millones de pesetas….." ¡Eso no es un hacker, eso es un ladrón! Por si hay algún hacker que todavía no sabe cómo actuar, cuál es la esencia que nos mueve, y de dónde venimos porque es demasiado joven, está bien que haya un libro que lo encarrile. También estaría bien que los periodistas llaméis a los ladrones, ladrones, y a los que revientan sistemas con malicia, 'crackers'.

P: Seguimos con la esencia del hacker… porque las cosas están cambiando tanto que ahora colaboran con las policías de mundo para rastrear los contenidos de los ordenadores de usuarios de la Red que son considerados de sospechosos. Yo puedo ser espiada y no enterarme.

R: El que estudia para arquitecto o ingeniero se gana la vida con su profesión. El hacker no estudia para ganarse la vida, adquiere los conocimientos de forma compulsiva. Lo normal es que sea el que más sabe de sistemas, por tanto, es el que más se tiene a mano para contratarlos en estos casos.

P: Miquel Barceló, profesor de la Facultad de Informática de Barcelona, propone crear una ética informática. ¿Cree que es posible?

R: La ley o se impone o la llevas puesta. En el caso actual, la tecnología e Internet ha llegado a tanta gente que es muy difícil controlarlas. La solución de los gobiernos de derechas es establecer un estado policial. Eso no es bueno. Internet era un estado puro antes de que llegara tanta gente o antes de que se utilizara de forma comercial. Y esa es la prueba palpable de que podía funcionar sin control. La Red, por sistema, es anárquica. Pero hasta hace poco se autorregulaba…

P: ¿A qué años se refiere cuando dice: " .. hasta hace poco"?

R: Hasta hace dos o tres años. Yo era proveedor de Internet y tenía un problema con uno de los ordenadores y me iba a otro proveedor de la competencia, le pedía uno y me lo dejaba. Había una colaboración entre nosotros. Y esa era la esencia de la Red, que siempre había sido colaborativa. ¿Qué ocurrió? Llegaron las grandes empresas y dijeron: "No, Internet ya no es romanticismo, esto es un gran negocio", y ahora ya nadie colabora. Eso antes no ocurría. Al final, puede que la ética de la informática y de Internet no la podamos asumir nosotros sino que tenga que venir, efectivamente, el 'señor de la porra' y la tenga que imponer. Y no me gusta, pero…

P: ¿Tan difícil ve que entre todos podamos responder a un comportamiento ético donde el respeto por las comunicaciones, las informaciones y los actos de cada uno sean siempre pensados en no hacer mal al de al lado?

R: Siempre que haya alguien que se desmadre vamos a dar una excusa a quien manda para intentar corregir ese desmadre. Bush (o quién sea) nos dirá que somos unos terroristas porque alguien se ha desmadrado, y nos pondrá al 'señor de la porra' encima. Para mi Internet, hoy por hoy, es el 'Gran Hermano', es Orwell.

P: Ya estamos saturados de leyes que actúan sobre nuestras acciones en la Red y que nos limitan constantemente (en el caso de la libertad de expresión, de la difusión de contenidos, de las transacciones, etc.). ¿Dónde cree que tiene que estar el límite de la legislación en Internet?

R: Volvemos de nuevo a la tecnología. ¿Qué ha hecho que Internet sea lo que es? Las nuevas tecnologías. ¿Qué es lo que corre más que la ley? La tecnología. No importa que ahora nos pongan al 'señor de la porra' encima. Siempre habrá una tecnología nueva. Por ejemplo, ahora nos quieren regular los contenidos en la web, bueno, siempre tendremos una forma de burlar esa norma porque la tecnología avanza y va por delante. Lo que no hay que hacer es medir el futuro con los parámetros del presente.

P: ¿Cómo se hace eso?

R: En los años 50, cuando un escritor de ciencia ficción definía una nave espacial ¿qué había en aquella época que le pudiera inspirar? Botones, palancas y agujas. ¿Qué pensaba que tenía que ser el futuro? Algo con más botones, palancas y agujas. Sin embargo, él estaba escribiendo con los parámetros del presente. ¿Qué ha sucedido después? Que no había nada de eso, sino un ordenador y una pantalla. Hoy, si pensamos en qué va a pasar con Internet con las leyes del presente no vamos a llegar a ningún lado. Por ejemplo, los movimientos wireless. En Barcelona, en Canarias, o en San Francisco se están extendiendo como manchas de aceite y es una nueva red ácrata porque no depende de operadoras, ni de nadie. Ya vendrá la ley a regular eso también, pero entonces… ¿qué habrá? Hay que ser valientes y pensar en cosas desconocidas para poder prevenir el futuro.

P: Sí, sólo que el 'señor de la porra' está saliendo cada vez más rápido y la capacidad de actuar es cada vez menor.

R: Siempre sale después de que haya ocurrido algo. Siempre protege como consecuencia de algo pasado. Si con la tecnología estamos en la cresta de la ola, este 'señor' está en el valle, siguiéndonos, pero detrás. Por tanto, ¡hay que estar siempre en la cresta de la ola, para que no te alcance!

Demasiado ruido

P: ¿Puede avanzar la tecnología a la misma velocidad que los 500 millones de cerebros conectados que hay en este momento?

R: No, y no porque no haya ciencia para hacer avanzar esa técnica sino por razones económicas. Eso vale dinero, ¿y quién lo pone? Internet está donde está porque en su tiempo fue gratis y pagada por el gobierno norteamericano. Pero ahora las operadoras como WorldCom están arruinadas.

P: Un informe reciente de Pew Internet&American Life destaca que el comportamiento de los norteamericanos cambia cuando están conectados a alta velocidad, son más interactivos y creativos. ¿Qué vamos a hacer con tanta creatividad?

R: La tecnología es capaz de soportar toda la creatividad de tanta gente porque, en realidad, todo es ruido. Lo único que tenemos es mucho más que hace unos años. ¿Quién lo discierne? La tecnología es la base, la autopista. Si encima pones camiones y miles de coches lo único que generas es tráfico y ruido. Otras tecnologías tienen que aparecer que fundan todo esto de una manera coherente, porque esos 500 millones de cerebros que somos ahora producen mucha creación pero también mucho ruido. ¿A quién favorece? A quién sabe buscar entre tanto. ¿Pero quién es capaz de encontrar algo? Porque no valen los Google ni sistemas por el estilo. Hay que ir a algo más avanzado.

P: ¿Tiene alguna idea en mente?

R: Hay que ir a una fusión más íntima entre el usuario y la Red. La parte más estrecha del ancho de banda es entre la persona y el ordenador. Es decir, tienes una velocidad para pensar muy rápida, pero vas lenta porque tienes que procesar lo que piensas al ordenador, el cual lo transmitirá a la Red. Estamos utilizando un interfase hombre-máquina desarrollada en los años 70 por Alan Kay. Hay que buscar algo más nuevo, algo que permita una interacción más intensa. Quizás haya que pasar de las máquinas, conexiones del hombre con otros hombres. Eso sería el ancho de banda total. ¡Ah!, ya estamos en la ciencia ficción, claro (risas).

P: Alan Kay cree que la revolución de la informática todavía no ha llegado y que el ordenador ideal sería aquel que funcionara como un organismo vivo. ¿Tenemos que esperar una revolución de los ordenadores?

R: Si, aunque para ello debemos dejar de depender de los estándares actuales. A Microsoft, por ejemplo, no le interesa tal revolución ya que perdería la supremacía. Y, por desgracia, Microsoft y cuatro más son los que dominan el mercado y, mientras puedan obtener beneficio de la actual situación, no es probable que aparezca algo revolucionario, al menos tan revolucionario como fue el ordenador personal, iniciado por Apple y el interface gráfico, creado en el PARC de Xerox, en la década de los setenta. Las revoluciones nunca las han hecho las grandes corporaciones si no los pequeños (económicamente hablando) visionarios. IBM y HP, por ejemplo, rechazaron la idea del ordenador personal. ¿Por qué? Porque las grandes compañías tienen por objetivo ganar dinero, no hacer revoluciones.

P: ¿Se puede imaginar un ordenador que sea un organismo vivo?

R: Si, claro. La primera etapa va a consistir en establecer una comunicación entre la máquina y el cerebro sin pasar a través de ninguno de nuestros cinco sentidos: comunicación neuronal. Luego, desarrollando elementos como los iniciados con el corazón arificial Jarvik-7 en su tiempo y sucesores actuales. Ya nada más queda que sustituir en un humano las partes mas propensas a desgaste o menos eficientes. O sea que, al final, lo que obtendremos es un Cyborg... que puede evolucionar a sólo 'cyber', sin la parte humana. Entonces, y usando a los actuales organismos vivos como punto de partida, habremos obtenido organismos sintéticos más eficientes que los actuales vivientes. Y gracias a la ingeniería genética, algunas partes que por su eficiencia de funcionamiento sea aconsejable utilizar, seguirán siendo orgánicas... y prefabricadas. Parece una herejía, ni siquiera ciencia ficción, pero… hay tantas cosas que antes parecían herejías y ahora son comunes.

La gran Manzana

P: Entramos en el tema de Apple. La mayoría de personas que trabajan con ordenadores lo hacen con Windows y consideran el sistema operativo Macintosh como algo en vías de extinción y difícil de aprender. ¿Por qué no se le atascó a usted la Manzana?

R: Te lo voy a decir claro y rotundo. Yo pertenezco al Club Mensa, cuyos miembros son todos superdotados intelectualmente. Así que… tengo que utilizar la Manzana.

P: ¿De dónde viene su romance con el sistema operativo Macintosh?

R: Es simplemente tecnología. Podríamos hablar en términos muy técnicos, pero para simplificar te diré que Apple nos ha dado tecnología más puntera que el resto basadas en entornos con plataforma Wintel. Siempre hay un año que otro de diferencia. Como ya he dicho anteriormente que a mí me gusta estar siempre en la cresta de la ola, mi ordenador sólo podía ser Apple. En el año 1985, los Macintosh tenían ventanas y los PC (basados en Windows) no existían, pero había algo parecido llamado CP/M (Control Program for Microprocessors), y las primerísimas versiones de Windows no tenían ventanas, ni tenían ratón. Cuando apareció el primer Windows utilizable, que fue el 2.1 (porque el 1.0 pasó sin pena ni gloria), en 1989-90, Apple ya llevaba cuatro o cinco años con un sistema 'ventanoso'. Alguien dijo hace tiempo: "Windows 2000=Macintosh 1984". Con esto te lo digo todo. Además, algo debe haber cuando Microsoft está pagando 126 patentes a Apple por recursos que utiliza su sistema 'Windows'. Apple siempre está por delante.

P: Es consciente que a partir de esta respuesta, muchos lectores van a dejar a un lado la entrevista…

R: Me parece muy bien, pero ¿estamos hablando de religión o de informática?

P: ¿Lo pregunta usted que es el creador del Mac-Club, una asociación que agrupa a macqueros de todo el mundo y que lleva en funcionamiento desde 1998?.

R: En España hay unos 400.000 ordenadores Macintosh, que no es ninguna tontería, y un 15% de los nuevos Macs que se están vendiendo en nuestro país pertenecen a ex usuarios de Windows. ¡No estoy hablando de cuatro hackers o gurús o fanáticos de la tecnología! Siempre se ha sabido que Unix es el sistema más estable y potente que hay, y Mac funciona debajo de Unix y encima tiene una interfase que es más 'humana' y no cosas complicadas como las de Windows. Además, el entorno Wintel es el que más usuarios descontentos tiene y sus ordenadores esperan en estanterías para ser reparados. ¿Cuántas veces has oído a un usuario de Windows que está descontento con su sistema? ¿Y cuántas a uno de Mac? Compara.

P: Creo que tiene que dar otra razón para convencer más a los pocos lectores de Windows que todavía nos sigan….

R: Vale. Una muy buena. Si entre la gente de Windows hay alguno sensibilizado por el medio ambiente y la ecología debe abandonar inmediatamente su máquina y cambiarse a la de la Manzana. Cada procesador Pentium está consumiendo unos 42 vatios de energía, cada procesador RISC utilizado por Macintosh consume 6 vatios. Si hay 300 millones de ordenadores Pentium a 42 vatios imagínate la cantidad de petróleo que estamos quemando sólo para poner en marcha esas máquinas. Estamos hablando de un consumo de más de 12 mil megavatios a la hora. ¿Cuantas ciudades se precisan para consumir esa energía? ¿Cuánta contaminación genera ese derroche energético? Un PC consume la energía de siete Macs. ¿Por qué? Porque es una tecnología anticuada. Los Macs no necesitan ventilador porque consumen muy poca energía, o tienen uno pequeño cuyo ruido no molesta. Trabajar de noche con PCs con sus ventiladores en marcha provoca dolor de cabeza. Yo trabajo de noche en silencio total. O sea, que los Pcs además de funcionar con una tecnología anticuada y gastar más energía, están consumiendo otra adicional que es la que necesita el ventilador instalado para refrigerarlo por dentro.

P: ¿Cómo evoluciona el Mac-Club? ¿Siguen los mismos macqueros de siempre ahora que es de pago?

R: Mac-club ha llegado a tener 3.000 socios, cuando era gratis, claro. En el 2000, lo hicimos de pago voluntario, unos 10-20 euros al año para sufragar los gastos de 'housing' y ordenadores dedicados (Mac-Club dispone de servidor de listas, direcciones de correo personalizadas, servidor de Hotline, etc.). Como eso representa un gasto nada desdeñable, al final dejé de asumirlo yo y pedí la colaboración económica de los participantes. Con ello, el número de usuarios se redujo a ciento y pico. El resto, ex-miembros, son radicales que piensan que Internet ha de ser gratis,

aunque al final lo pague todo 'Tito Alberto' . Los extranjeros no pagan (por las complicaciones que hay para que un argentino, por ejemplo, te haga llegar esa cantidad al año), y hay bastantes de Latinoamérica. O sea, que ahora somos unos 500 contando los ciento y pico españoles que colaboran económicamente.

P: Por cierto, ¿Macintosh y el Open Source son rivales?

R: ¿Por qué? O como dicen los gallegos ¿"de que xeito?" No olvides que el núcleo del sistema operativo MacOs X es Open Source y que, de hecho, todo el MacOs X, a excepción del interface Aqua, es Open source. Nada puede ser rival de sí mismo.

P: ¿Qué opina que el soft de código abierto se utilice en cada vez más proyectos?

R: Es un camino lógico. Pero no hay que olvidar que Open Source no equivale a "gratis". Recuerda que la palabra inglesa "free" tiene dos traducciones en español: "gratis" y "libre". Es muy común que la gente confunda ambos términos al traducir o interpretar el espíritu GNU. En el caso del Open Source y las licencias GNU, la traducción exacta es "libre". O sea, el código es abierto y público y todo el mundo tiene derecho a modificarlo o a adaptarlo. Pero también tiene derecho a cobrar por ello.

P: Las administraciones de los gobiernos del Tercer mundo (especialmente Latinoamérica) son las que se están atreviendo a implantarlo antes, por el ahorro de gastos. ¿Qué le diría a nuestro gobierno para que cambiara de idea y dejara de lado a Microsoft?

R: Mira, España, como el continente al que pertenece, es un pais viejo, sus lideres son viejos (no en edad, en mentalidad). Y, sobre todo, las nuestras (las de nuestro entorno) son mentalidades ultracapitalistas. Pero todo acaba, acabaron los dinosaurios, acabó el imperio romano, acabó Enron y acabará todo lo que hoy parece tan sólido que nada va a terminar con ello. Al gobierno le diría que mirase menos a los poderes fácticos (aunque ese gobierno comulgue con ellos) y más a las realidades de la Historia. Open Source es una apuesta segura de futuro y cuando más y más empresas (y no pequeñas precisamente) comienzan a rechazar la prepotencia de entidades dominantes del software, léase Microsoft, es por algo.


Regreso al pasado

P: Usted ha vivido intensamente todos los hechos ligados a la Red durante los años 80 y 90. ¿Cuáles de ellos salvaría, o cuáles deberían saber las nuevas generaciones para tener un conocimiento de dónde venimos en Internet?

R: Primero hay que decir que sin el ordenador personal no habría habido Red. No es una etapa, pero define el principio. Cuando la Red sólo era académica, en los tiempos de ArpaNet, no servía para nada al público en general. Cuando el ordenador llega al público entonces todo cambia. Eran los años 70, y fue gracias a Steven Wozniak y Steven Jobs (creadores de Apple), porque IBM lo inventó más tarde. El siguiente hito -y no hay ninguno más por el medio- será cuando tu casa te conecte con otras casas. Esto Eudald Doménech te lo explicaría muy bien, porque está experimentando con ello, más allá de la Domótica.

P: ¿Y qué destacaría de esos años en España?

R: La aparición de las BBS que llegamos a ser un centenar y, posteriormente, nos convertimos en Proveedores de Servicios de Internet (PSI). Al principio, yo tuve la BBS SoloMac que luego se convirtió en Servicom, dirigido por Eudald Doménech y con quien estuve en los inicios. Después, nos separamos y monté Seker (BBS y PSI). Pero el primer proveedor de España fue Goya, aunque daba servicios sólo a empresas. Servicom supo llegar a mucha gente, pero murió de éxito porque fue el primero que se atrevió a publicitar más de lo que podía ofrecer. Le pasó por ser demasiado visionario. El otro hecho destacable fue el aterrizaje de los bancos que convirtió todo esto en un intento de negocio. Y los románticos nos quedamos a un lado. Algunos con mucho dinero porque empresas extranjeras o los bancos les pagaron muy bien. Y, otros, como yo, sólo con mucha experiencia.

P: Usted, además de visionario y experimentador de la Red, es también un empresario. ¿Cómo entiende el momento actual de las empresas 'puntocom'? Hemos pasado por un auge, un declive, ¿qué más podemos esperar?

R: Yo como empresario lo que tengo que hacer es crear áreas de negocio donde nos ganemos los garbanzos. Como mi empresa es tecnológica debo estar muy al día con lo que va a venir. ¿Sabes cuál es el problema? Un programador que hace programas de gestión para las empresas se ganará muy bien la vida hasta que vienen 40 mil más como él que hagan lo mismo. Ese señor si quiere estar en la cresta de la ola ha de oler qué se va a necesitar en unos años. ¡Y quizás sea poner clavos en un teclado!. Pero tampoco hay que ir demasiado por delante, porque si Eudald Doménech tuvo algún fallo en sus inicios fue adelantarse mucho a su tiempo. Si vas sólo un poco por delante, puedes vender más caro porque eres el único y no tienes competencia. Y cuando llega ésta, avanzar algo más. Nosotros ya no somos proveedores, ni hacemos páginas web que tan de moda se puso, ahora somos consultores tecnológicos de empresas y ayudamos a aislar el ruido que genera la instalación de máquinas y programas informáticos.

P: En toda esta historia, creo que se olvida de mencionar a Angie su compañera que le sigue en todas sus aventuras tecnológicas desde hace…

R: Está conmigo desde hace veinte años, siempre a mi lado. Angie hace todo el trabajo duro de todos nuestros negocios, especialmente el de pensar. Creamos una empresa de ordenadores personales cuando no había ninguno en el mercado. [Angie nos acompaña silenciosa y al recordar esto estalla en carcajadas]. La empresa se llamaba Nanosoft (no era Microsoft porque era más pequeña que la compañía de Bill Gates), y corría el año 1981-82. Y un poco antes puse, con mi socio Jaume Xifré, la primera tienda de ordenadores de España, aunque me atrevería a decir del mundo y de parte del extranjero (risas). Para mí, él fue en 1979 y los ordenadores personales, lo mismo que Eudald Domenech e Internet en 1992. La historia se repite: un técnico visionario, y un experto en marketing y responsable de conseguir dinero... y un fracaso total por comenzar antes de tiempo. Yo he sido el único personaje común en estas historias: el técnico visionario. Los otros -los de marketing y el dinero- han ido sucediéndose en varias personas.

P: Desde hace diez años, usted y Angie organizan unas calçotadas, que reúne a la comunidad macquera de España durante un par de días. Eso sí que es un aunténtico trabajo en red. ¿Cómo consiguen que año tras año venga más gente?

R: Viene gente que no es macquera también. Lo hacemos a través de Mac-Club, de nuestros contactos. Pero el trabajo es todo de Angie. A mí me dicen: "Alberto es que tienes un poder de convocatoria…". Y yo digo: "¡Y un cuerno! Es ella quien lo hace todo". Tiene sus métodos porque persigue a la gente por teléfono, envía mensajes a listas de correos, notas de prensa en revistas especializadas (algunas la publican, otras no porque no les caemos simpáticos), etc. Ahora hemos tenido que limitar las plazas: la media son doscientas personas por calçotada y cincuenta por castañada (que también organizamos). En la calçotada si no ponemos un tope de gente se hace complicada la logística.

P: Pero ¿qué tienen que ver los calçots con la Manzana? ¿Es una buena combinación?

R: (risas de Angie y Alberto) Decidimos reunir a la gente porque un día, en el año 1992, pensamos en organizar una calçotada entre unos amigos (macqueros, por supuesto), entre los que ya se encontraba Eudald Domènech. Y, entonces pensamos: ¿Y si la hacemos cada año? La BBS SoloMac fue creciendo y pasó de ser cuatro macqueros a 40.000. El calçot ya estaba instaurado en Cataluña y la Manzana, por otro lado, también… sólo quedaba juntarlos. Tiene mucha gracia porque cuando intentas exlicar a un madrileño recién llegado al club lo que es un calçot (curioso, porque siendo macquero debería ser inteligente y saberlo) y tienes que engañarlo un poco. Porque si le dices: "Mira, vas a hacerte 600 Km. , o vas a coger un avión, te vas a gastar un dinero en un hotel o una estancia, vas a estar dos días fuera de tu casa, para finalmente comer unas cebolletas…", te dice que ni hablar. Entonces le tienes que explicar que vamos a hablar de las novedades de Mac y, de paso, probará un plato típico catalán que está riquísimo.

P: ¿Y qué ocurre realmente en estos encuentros, además de los calçots y las risas?

R: En realidad, intercambiamos experiencias, sorteamos regalos que Angie consigue de casas comerciales como camisetas, publicaciones, Asistentes Digitales Personales (PDA), programas de ordenador, etc., y, por supuesto, después de la comida y la diversión se entabla un interesante debate que abren ciertas personas destacadas del mundo Apple o de Internet y charlamos todos juntos en una gran mesa. Al final de los dos días, como ya casi todo el mundo se conoce, la gente abre sus ordenadores portátiles, empiezan a echar cables y montan en un momento una red. ¿Qué hacen? Se intercambian programas shareware, se enseñan novedadades, a veces ha venido algún músico y ha pasado sus obras porque después si eso queda bajo un sello ya no es posible distribuirlo gratis, etc.

Viaje al futuro

P: Lo que tenemos ahora en la Red es una réplica de nuestra compleja sociedad real, pero con menos habitantes… ¿Cree que los internautas están viviendo una realidad diferente de la gente que todavía no se ha introducido en ella?

R: Sí, sí, está claro. Mira, en la Edad Media lo que funcionaba era un sistema feudal, núcleos pequeños que los controlaba un señor que daba protección desde su castillo. Había muchos núcleos de éstos que se fueron fusionando, como gotas de mercurio, hasta aparecer los países. Ahora aparecen comunidades, federaciones, dentro de poco tendremos uno, dos o tres estados a nivel mundial, nada más. Internet ya lo ha hecho, nos está preparando para lo que será físico dentro de poco. ¿Qué sucede? Esas leyes que ahora intentan ser supranacionales en la Red van a venir muy bien cuando no haya naciones. Al final puede que sea el planeta Tierra una sola nación.

P: Está usted apuntando muy al futuro, ¿no?

R: Sí, muy al futuro pero mientras en la vida real todavía queda mucho para imaginárselo, en Internet ya está ocurriendo. ¿Te das cuenta? Yo estoy comprando en EEUU sin pagar los impuestos de mi país, y están intentando regular esto. Físicamente, cada vez hay menos fronteras. Virtualmente, no hay ninguna. ¿Las leyes? Se están preparando para cuando hayan desaparecido todos los límites físicos. Sí, queda tiempo… pero todo pasa muy rápido. ¿Quién iba a decir en los años 80 que todos los europeos íbamos a utilizar el euro y que dentro de muy poco vamos a ser una Federación Europea, como EEUU? O acabaremos totalmente divididos en hemisferio Norte y Sur. Las cosas se aceleran. Dos años antes de la caída del Muro de Berlín nadie lo preveía. En Internet ya somos una entidad planetaria. ¿Las leyes? ¡Qué gracia! Las leyes de un país en Internet no se pueden aplicar en otro porque son diferentes y, sin embargo, Internet se salta todas las leyes locales de cada país. Solución: regular técnicamente Internet, dejarlo todo en manos de dos o tres operadoras que sean los dueños de la Red y que ellos manden. Orwell, de nuevo. Pero entonces, saldrá una nueva tecnología -ahora son las FreeNet con radio-que no controlarán y se echarán encima para tenerla bajo su dominio.

P: Ya que estamos mirando al futuro, el antropólogo Eudald Carbonell dice que todavía no somos humanos, que lo seremos cuando sepamos redestribuir equitativamente la riqueza del mundo. Entonces, vendrá la fase de la deshumanización donde nos implantaremos chips. ¿Qué opina?

R: ¿Por qué no? Si vamos a una supranación y la primera demostración es Internet, y la siguiente es la física que realmente está haciendo caer fronteras, ¿por qué no vamos a ir a una 'supramente' o a una 'suprapersona'? No tiene que rasgarse nadie las vestiduras. Ya hay una diferencia entre nosotros y el Neandertal, tiene que existir otra entre lo que somos y lo que podamos ser. ¿Podemos ser inteligencias ambulantes? ¿Por qué no? ¿Quién dice que la evolución tiene que ser solamente basada en los métodos de Darwin? Podemos ayudar a Darwin un poco, ¿no? Si lo que estamos haciendo es crear una 'suprainteligencia', ¿quién va a justificar los medios? Es ciencia ficción, futuro, pero no sería mal camino. Porque lo otro sería quedarnos estancados.

P: Sería medir el futuro con los parámetros del presente…

R: Los escritores de ciencia ficción o películas te presentan a unos señores sin manos porque nos las necesitan, sin dientes porque no los utilizan, y con unos cabezones inmensos. ¿Qué estamos haciendo ahí? De nuevo medir el futuro con los parámetros del presente. Decimos: "Si cuánto más gorda es la cabeza, más se piensa; el hombre dentro de 10.000 años tendrá un cabezón" ¿Por qué? No. A lo mejor, no tiene un cabezón, son cien cabezones o cien cabecitas unidas que funcionan con unos métodos que nosotros hemos ayudado a implantar. O sea, que nosotros estamos haciendo la evolución también. De hecho, de Neandertal hasta aquí el hombre ha evolucionado creando nuevas máquinas y artilugios que han ayudado a seguir adelante. ¿Por qué tendría que pararse aquí? Ahora ya no es el tiempo de las hachas de sílex, sino el de los chips: de silicio o neuronales o de lo que sea. Estamos marcando nuestra propia evolución. Pero ¿quién se atreve a decir que vamos a evolucionar en el futuro como lo hemos hecho en el pasado? ¿Por qué si nuestro entorno está cambiando con nosotros? La ciencia y la tecnología van a ayudarnos a ello. No se sabe qué va a pasar, pero cómo todo tiene un fin, como al final todo será una Supernova… tampoco debemos preocuparnos mucho.

P: Y antes de que llegue el momento de la Supernova….¿cree que estaremos conectados a Internet los 6 mil millones de habitantes del planeta?

R: Si nos dejamos de puñetas, sí. Y dejarnos de puñetas es dejarnos de perseguir terroristas, hipotéticos o reales, de dejar de satanizar al que tiene que ser malo, y pensamos que todos los que vivimos en la Tierra tenemos el derecho a compartir todos los recursos que tenemos a nuestro alcance, llegará el día en que estemos conectados. Pero… antes hay una gran labor por medio. Y ahí sí que no podemos hacer nada los técnicos.

P: Ni los científicos

R: Ni los científicos, ni la 'mano dura'. Pero primero hemos de conseguir que no haya Tercer Mundo, y eso lo veo difícil porque el Primer Mundo vive a costa del Tercero. ¿Cuándo va a suceder eso? Las grandes corporaciones tienen que desaparecer, es una idea ácrata, pero es así. Cuando eso se logre, los miles de millones de habitantes que quedemos, que quizás ya no sean los 6.000, estaremos conectados, pero antes…hay que romper muchas barreras. ¡Ojalá! Pero me parece que eso será…sí, justo un poquito antes de la Supernova.

Imprimir Recomienda esta URL
CATALÀ
Buscar por temática
 Búsqueda avanzada
LAFH en:
  • Google
  • Yahoo!
  • Ask Jeeves
  • Terra


  • ©LAFH, 2005. Todos los derechos reservados. lafh@lafh.info producido por gnuine